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sábado, 29 de enero de 2022

Ozono bueno, ozono malo


El ozono es un gas que se encuentra de manera natural en la atmósfera, formando la capa de ozono (ozonosfera). La palabra proviene del griego "ózein", que significa tener olor. En este sentido, se caracteriza por su olor metálico; además es picante e incoloro, aunque a altas concentraciones adquiere color azulado. Su molécula está formada por 3 átomos de oxígeno (O3). Por su gran efecto oxidante y su acción antimicrobiana, se usa para tratar aguas negras, como desinfectante, blanqueador y para esterilizar el aire. Puede ser “bueno” o “malo”, dependiendo de la zona donde se localice. 

Cerca del 10% del ozono se encuentra en la troposfera (es decir la capa donde nos encontramos nosotros y el resto de seres vivos, la capa más cercana a la superficie terrestre) y el resto, el 90% se encuentra en la estratosfera, entre la parte superior de la troposfera y hasta unos 50 kilómetros de altitud. La capa de ozono se encuentra entre 15 y 35 km sobre la Tierra. 

El ozono “bueno” está en la estratosfera y nos protege de absorbiendo la mayor parte de los rayos ultravioletas que llegan del Sol. Se forma a partir del O2 del aire, por acción de la luz. El proceso es reversible y origina una capa renovable y de una concentración que no varía porque la velocidad de formación es igual a la de descomposición.

Parte de la capa de ozono bueno desapareció por sustancias químicas fabricadas por el hombre (clorofluorocarbonos (CFC), empleados en aerosoles, tanto industriales como domésticos). Sin suficiente ozono bueno, las personas pueden exponerse a demasiada radiación ultravioleta. Eso puede aumentar el riesgo de cáncer en la piel, cataratas y problemas en el sistema inmunitario.

El ozono “malo” está en la troposfera, cerca del nivel del suelo. Es un contaminante secundario que se forma por un complicado proceso químico cuando los contaminantes de vehículos y fábricas reaccionan con la luz del Sol. Suele ser peor en verano. Es el componente principal del esmog. 

Respirar el ozono malo puede ser dañino. Provoca tos, irritación en la garganta, empeoramiento de afecciones como asmabronquitis y enfisema y hasta daños pulmonares permanentes, si la exposición a éste es habitual.

El ozono, además de para las personas, es también tóxico para la vegetación, dañando los bosques y reduciendo la productividad de los cultivos.

 

(Noticia de junio de 2018: La OMS estima en 1.600 los fallecimientos prematuros anuales en España producidos como consecuencia de la exposición a niveles de ozono).

 

Algunas cuestiones sobre los agujeros de ozono polares


¿Por qué el “agujero de ozono” apareció sobre la Antártida?

¿Por qué el “agujero de ozono” apareció sobre la Antártida si las sustancias que destruyen el ozono están presentes en toda la estratosfera? 

Las sustancias agotadoras de ozono están presentes en toda la estratosfera porque son transportadas a gran distancia por movimientos de aire atmosféricos.

El serio agotamiento de ozono en la región antártica conocido como el “agujero de ozono” se debe a las condiciones meteorológicas propias en dicho lugar lo cual no sucede en otras partes del globo.

Las bajas temperaturas de la estratosfera antártica crean nubes de hielo llamadas “nubes estratosféricas polares” (NEPs). En las NEPs ocurren reacciones especiales y el aislamiento relativo del aire polar estratosférico (vórtice polar) causa la reacción del cloro y bromo que agotan el ozono en grandes cantidades en la primavera antártica.


¿Hay un agujero de ozono también en el Ártico?

Sí lo hay, pero en el Polo Norte, el agujero de la capa de ozono no se ha igualado al del Sur, en parte debido al éxito de los esfuerzos internacionales para limitar los productos químicos que lo agotan. El Ártico es unos pocos grados más caliente que la Antártida, incluso en los años más fríos, y eso crea una gran diferencia química. Los elementos químicos son más eficaces en la destrucción de la capa de ozono donde hace más frío, y la Antártida es realmente el lugar más frío del planeta.


¿Qué es el Protocolo de Montreal?

En 1987, representantes de 43 naciones firmaron el Protocolo de Montreal se comprometieron a mantener los niveles de producción de CFC de 1986, y a reducirlos en un 50% en 1999. Pero al irse acumulando más evidencia científica sobre el origen humano de la disminución del ozono, se hizo necesario un nuevo acuerdo, que se firmó en 1990 en Londres.

Los participantes se comprometían a eliminar totalmente los CFC’s en el año 2000. Sólo se permitía un pequeño porcentaje marcado como de uso esencial, como los inhaladores para casos de asma. Una nueva reunión en 1992 en Copenhague adelantó la fecha de eliminación al año 1996.

Gracias a estas medidas, recientemente se ha publicado que el agujero de la capa de ozono se está recuperando y seguirá haciéndolo en las próximas décadas.

(Vórtice polar: Un vórtice polar es un área grande de baja presión y aire frío que rodea ambos polos de la Tierra. Los vórtices polares siempre existen, pero generalmente se debilitan durante el verano y se fortalecen en el invierno. El vórtice polar en el Ártico es típicamente más débil debido a la presencia de tierra cercana.)

Fuente: Santillana.es


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